La criatura se rebela contra el creador, con la diferencia de que en el libro de Shelley el creador existe sin ninguna duda posible. Nosotros, criaturas al fin y al cabo, tenemos esa duda (“simpático nombre de perrita rusa”) y, precisamente porque la tenemos, podemos elegir si decidimos creer, no creer, o mantenernos en la duda. Yo, personalmente, me quedo con la duda.
-Pero alguien habrá tenido que crear el universo...
-No necesariamente. Del universo apenas conocemos una milésima parte: ni siquiera conocemos de forma perfecta este planeta en que habitamos; ni siquiera sabemos cuántos planetas orbitan en nuestro sistema solar. Con “nuestro sistema solar” quiero dejar caer que hay no-se-sabe-cuántos-cientos/miles/millones de sistemas solares, de modo que el nuestro es una simple minucia, y no tiene más importancia que una simple gota de H2O en el océano. Es porque no conocemos nada más allá de nuestras fronteras que pensamos que somos el centro del universo. Efectivamente: yo soy el centro de mi universo y a mi lado está la gente a la que quiero, aprecio, me quiere y me aprecia. Pero ese es “mi” universo.
No es, por tanto, descabellado pensar que en algún sistema solar situado a no-sé-cuántos-cuatrillones-de-eones-de-años-luz puede existir vida inteligente. ¿Alienígenas? Puede. De hecho nada impediría, manteniéndonos dentro de lo lógicamente posible, que en algún sistema solar haya un planeta formado en su mayor parte por agua donde habiten seres que se llamen a sí mismos humanos, que hayan llegado a la conclusión absoluta de que es imposible que exista vida más allá de su planeta y que crean en que un Ser Supremo al que llaman Ed. Expunctor creó el universo en doce siglos, tomándose trece días cada dos semanas para fumar y descansar en playas con Arenas, y los hizo a su imagen y semejanza.
Pero nos quedamos con ese simpático nombre de perrita rusa llamada duda.
5 comentarios:
Es un post profundo, y me gusta especialmente porque en este momento me estoy leyendo "universo" de Asimov. Os lo recomiendo.
Pero bueno Ed.Expunctor, dejo este post para dejarte mi gotita de sabiduría informática, y proponerte un negocio (y ojo que va en serio, pero tiene que ser deprisa)
Me has hecho ver con tu post, que la web www.dios.com no existe. Te propongo comprar a medias el dominio, y poner algo ahí. Lo que sea. Y luego publicidad. A ver que pasa ¿no?
Si estas de acuerdo, mandame un mail o un sms, ya lo pago yo, y luego hacemos cuentas. Son 20 euros cada uno por año aproximadamente. Yo creo que recuperaremos la inversion, pero si no, ya sabes. ;) un año vacilando de nuestra web es www.dios.com.
Date prisa que nos lo quitan!
Vaya... la web no existe, pero el dominio esta comprado. arggg.
No está ni Dios, ni dioses, ni diosas ... como mucho "deidad" pero pierde mucho. Está www.gods.es ;)
Mira que lo pensé, cuando puse el enlace y vi que no había nada me chocó: qué raro, pensé, que nadie lo haya pillado. Seguro que alguien lo compró y no pone nada para salvaguardar el nombre de dios... porque fijo que alguien habría puesto una página porno!
paz!!
Y quien dice alguien, dice yo. Que el dinero es el dinero. En fín, y si alguien se ofendiera, pues le revendo el dominio y que ponga él lo que quiera.
Qué profundidades con estos calores!! Coincido contigo en los mini universos, los micro cosmos particulares. Los hay de grupos de amigos, de gente del trabajo, de hinchas de un equipo de júrgol. Nada existe salvo esas "mundillos". A mí, lo que realmente me acojona es pensar ¿y si es mentira todo como en el Show de Truman? ¿Y si en realidad estamos todos muertos, como en "Los otros"? ¿Y si fuera de nuestra órbita ya hay seres hiperdesarrollados y nuestros fantasmas vagan pensando que el futuro, nuestro futuro, existe, cuando en realidad ya somos pasado? ¿Ya somos polvo (enamorado, o no)?
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