22 noviembre 2006

La vieja de las estampicas

- ¡Cómprame una estampica, hijico, por la Virgen!- me grita la vieja cada vez que paso por delante de su puesto. A veces sólo grita; a veces, además de gritar con su voz aguda, me llama insistentemente con la mano para que me acerque a comprarle una estampica.

Yo, sin dejar de andar, le respondo con un gesto: Es que a mí las estampicas no me interesan. Y a continuación sólo oigo un tenue murmullo que nunca he llegado a comprender, y no sé si por los gestos de la señora son de desesperación porque no vende ninguna estampica o si son una maldición por no comprarle.

No sé el tiempo que llevo viéndola allí. Sentada en su silla, su mesa plegable llena de montoncitos de estampas, junto al acceso peatonal del parking que hay enfrente de la puerta del Ayuntamiente. Tampoco sé por qué se me ha metido en la cabeza que la mujer vende estampas de la Virgen, aunque supongo que es porque siempre que me dice que le compre una estampica añade la coletilla ‘por la Virgen’. También es muy probable que venda estampas de paisajes murcianos, como la típica de la Noria, aunque tendría las mismas, porque no soy yo de los que se dediquen a coleccionar estampicas.

Entre semana, casi siempre que paso por allí está ella. A veces no, pero están, envueltas en plástico, su mesa plegable y su silla, y creo recordar haberla visto alguna vez con una sombrilla para protegerse del sol abrasador que nos derrite las uñas y las pestañas en verano, y ya sabemos que decir ‘verano’ en Murcia es como decir las dos terceras partes del año, de marzo a octubre.

Un día de estos me acerco y le compro alguna estampica, si no las vende muy caras. Y ya de paso le propongo que haga estampicas en las que salga ella vendiendo estampicas, pues al fin y al cabo ella ya forma parte del paisaje urbano de Murcia, y así podrá vender metaestampas y subirse al tren de la vanguardia estampística: estampas de la vieja vendedora de estampas vendiendo estampas.

4 comentarios:

José Manuel Martínez Sánchez dijo...

Muy bueno, en serio, lo de las 'metaestampas' ha sido un puntazo, llevas razón, la estampa, convertida en signo, es referenciado por otro signo de signo, la señora. Todo un ejemplo de semiótica.

Anónimo dijo...

Sí, la verdad es que fue un puntazo de esos que salen sobre la marcha conforme vas escribiendo.
Paz!

Jonathan dijo...

Si ... un ejemplo de semiótica (o semiología) digno de Roland Barthes, o del más reciente Daniel Chandler...

Vale vale ... era broma. Lo he tenido que buscar en wikipedia porque no sabía lo que era.

Saludos

Imperator dijo...

También podrás observar en la mesa de la señora los ultimos recibos, aún sin pagar, de la luz y el agua.