22 septiembre 2009

Prohibiciones y prohibidores

Si llegan a prohibir fumar en los bares, espero que sean consecuentes —los señoritos del poder legislativo, que vienen a ser los del ejecutivo, que nombran a la mayoría de los del judicial— y prohíban circular a los coches y funcionar a las fábricas, porque si yo te mato con mi humo, no te matan menos los humos de los coches ni los de las fábricas.

En este punto, las prohibiciones de los políticos son tan hipócritas y tan incoherentes como en tantos otros temas. Prohíben el cannabis y permiten el alcohol; prohíben el asesinato y entrenan a asesinos; prohíben la prostitución y se prostituyen ellos mismos; prohíben el robo y roban, y prevarican, y cohacen, y malversan, y manipulan, y mienten, y se justifican y se sonríen y siguen robando.

Deberían prohibirse a sí mismos, y dictar una ley tanática que les decrete su guillotina.

3 comentarios:

Thedarksunrise dijo...

Uno de cada diez fumadores dejó el tabaco tras aprobarse la primera ley que limitaba el consumo en España :) Microbesis!!

PD: perdón por el tachón

Unknown dijo...

con dos cojones¡¡¡

Anónimo dijo...

Muy de acuerdo con el segundo párrafo, y menos con el primero. Suena a excusa de fumador cabreado.

Que yo sepa los coches no sueltan nicotina, que si no ya habría unos cuantos yonkis por ahí chupando tubos de escape...aún así a ver cuando sacan los coches eléctricos leñe.

En cuanto a las fábricas, se están reuniendo los políticos estos días para bajar las emisiones, aunque maldita sea, todos sabemos que no servirá de nada hasta que les estalle el problema en los morros.

Y respecto a la ley antitabaco, en todos los países más avanzados de Europa entró en vigor hace ya tiempo una ley antitabaco que prohibe fumar en sitios públicos. En España, como no, vamos a remolque..