De miel tus ojos satélites
circundan mi cuerpo ingrávido.
Me flotan más tus lunas
de almíbar cuando me miran
y me inyectan su blancura
con labios de blanca aguja:
son tus estrellas brillando
diluvios de luz y blanco,
refulgiéndome sus rayos
de blancor inmaculado.
De miel tus ojos reblancos
lamiendo mi cuerpo ingrávido.
3 comentarios:
Me tienes impresionadísima, ¡que fluidez!
Un beso
Isabela
Qué claridad y qué brillo. Blanco nuclear, querido. Besisss
Fluidez blanca y brillo impresionante XDDD
Publicar un comentario